El cine y yo

Me resulta imposible imaginar mi vida sin el cine. De alguna manera me ha ido conformando en salas oscuras, donde el universo por entero brillaba ante mí y la realidad, la otra realidad, desaparecía milagrosamente para dar paso a una vida ilimitada. Al menos, cuando yo era niño era así.


Uno de los primeros recuerdos que tengo es de pánico y fascinación. La película se titulaba "Jerónimo" y yo tenía tres años. En un televisor en blanco y negro, con una imagen seguramente bastante pobre, aquella película me aterraba y me atraía en partes iguales, y yo sentía que estaba ante algo que me superaba. Desde entonces, mi vida y el cine han ido de la mano.


El cine me nutría de imágenes que abrían mi imaginación como quién abre una ventana a las montañas. El cine me proporcionaba una vida nueva infinita en aventuras y en heroicidades. El cine era un baúl, un escondite y una fuente. En el misterio estaba la plenitud.


El cine eran las sesiones de los sábados a las cuatro; eran las películas para adultos a las que accedíamos antes incluso de llegar a pisar la adolescencia, con el atractivo inmenso de todo lo prohibido; eran las fichas en cartulinas y los recortes de fotografías; eran los estrenos con colas interminables; era la conversación con aquella chica que me atrapó hasta hacerme olvidar donde estábamos... e incluso fue una declaración de amor.


No puedo imaginarme mi vida sin el cine. Nada sería lo mismo. Dejemos pues que pasen ante nosotros, en palabras, imágenes de toda una vida.

jueves, 15 de mayo de 2025

Una joven prometedora



Dirección: Emerald Fennell.

Guión: Emerald Fennell.

Música: Anthony Willis.

Fotografía: Benjamin Kraĉun.

Reparto: Carey Mulligan, Bo Burnham, Alison Brie, Clancy Brown, Jennifer Coolidge, Laverne Cox, Chris Lowell, Molly Shannon, Connie Britton.

Cassie (Carey Mulligan) trabaja como camarera día, después de abandonar su carrera de medicina, y por las noches frecuenta bares fingiendo que está borracha para castigar a posibles agresores sexuales.

Una joven prometedora (2020) es un film que te deja mal cuerpo, por todo lo que lleva dentro, por cómo lo cuenta Emerald Fennell y por su desolador desenlace. Si es lo que pretendía la directora, y también guionista, bravo por ella.

La película nos mete en la piel de Cassie, una joven traumatizada por la violación y muerte de su mejor amiga a manos de unos compañeros de universidad. Cassie no ha logrado superar ese trauma y lleva una vida triste, sin amigos, con un trabajo anodino y donde la sola vía de escape es provocar a posibles agresores sexuales para vengarse de ellos. Al final, también decide saldar cuentas con los responsables de la agresión a su amiga y los que miraron para otro lado en lugar de intentar hacer justicia.

Con un argumento así, es fácil que nos quedemos atrapados con la historia, sobre todo porque Cassie es un personaje muy triste, sin expectativas, sin esperanza, anclada en el pasado, en ese dolor que la ha cambiado como persona.

Es verdad también que la venganza de Cassie es un tanto descafeinada, lo que deja trazas de un moralismo extraño, donde Cassie, más que ejercer la justicia por su cuenta, parece contentarse con hacer reflexionar a sus víctimas sobre sus actos; lo que hace que no estemos ante la típica historia de venganza tantas veces vista. Y es lo que convierte a Una joven prometedora en un film realmente original que ha sabido darle una vuelta de tuerca a un género anclado en unos argumentos muy estereotipados.

Si toda la película resulta bastante dolorosa, esto se acrecienta con un final desolador, sorprendente, que termina por dejarnos muy mal cuerpo. Sin duda, dado el tema tratado, se puede entender, pero en el fondo hubiera deseado el típico final feliz, tal vez porque la realidad que nos muestra Una joven prometedora es demasiado dura y soñábamos con que Cassie, un personaje con el que empatizamos, pudiera al fin pasar página y ser feliz.

En todo caso, con sus debilidades, como un guión demasiado forzado en algunos momentos, me pareció una película realmente original y con un mensaje que te golpea de lleno. 

Una joven prometedora se llevó el Oscar al mejor guión original.

miércoles, 7 de mayo de 2025

Final feliz



Dirección: Joosje Duk.

Guión: Joosje Duk.

Música: Alexander Reumers.

Fotografía: Ezra Reverda.

Reparto: Gaite Jansen, Martijn Lakemeier, Joy Delima, Sinem Kavus, Claire Bender, Sidar Toksöz. 

Luna (Gaite Jansen) y Mink (Martijn Lakemeier) llevan un años juntos y, aunque son bastante felices, Luna tiene un problema importante: no consigue llegar al orgasmo cuando tiene sexo con su novio.

Película holandesa distribuida por Netflix, Final feliz (2023) es una comedia romántica extremadamente sencilla. Y ahí reside su encanto y también por ahí se pueden encontrar sus debilidades, pues evidentemente no estamos ante una gran película, lo que no quiere decir que no funcione.

Para empezar, Final feliz nos cuenta una historia de amor que se hace entrañable por los protagonistas: una pareja de dos buenas personas que nos caen bien desde el primer minuto. No son los típicos guaperas perfectos, inteligentes, sexis... es gente muy normal y no es difícil ponerse en su piel.

Además, la base de sus problemas, el que ella no consiga llegar al orgasmo y tenga problemas para decírselo a su pareja por miedo, es un toque realmente original que está tratado con elegancia y muy buen gusto, sin caer nunca en chistes fáciles o momentos groseros. La elegancia al tratar todas las escenas sexuales es tal vez otro de los grandes méritos del director. Por ejemplo, en las escenas de cama, logra transmitir la pasión del momento sin llegar a lo vulgar, conservando incluso un toque romántico.

Tampoco se recurre a las exageraciones, chistes fáciles, personajes secundarios extravagantes... está todo controlado, nada sobresale del enfoque elegante y amable, con lo que podemos disfrutar de una historia que se desarrolla con naturalidad y sin estridencias. Me pareció un enfoque perfecto dado el tema tratado.

Pero el mayor acierto de la película reside en contar con Gaite Jansen, una actriz atractiva, es cierto, pero cuyo mayor encanto reside en su frescura, su naturalidad, incluso su fragilidad. Acabas enamorándote de ella por cómo es. Creo que con otra actriz, Final feliz no hubiera funcionado tan bien. Gaite Jansen es el alma de la historia.

Así pues, si buscas una comedia con un toque diferente, elegante, ágil, ligera y entrañable, Final feliz no te decepcionará.

viernes, 2 de mayo de 2025

La perfecta desconocida



Dirección: Joshua Marston.

Guión: Joshua marston y Julian Sheppard.

Música: Danny Bensi y Saunder Jurriaans.

Fotografía: Christos Voudouris.

Reparto: Rachel Weisz, Michael Shannon, Michael Chernus, Azita Ghanizada, Omar Metwally, Chris Lowell, Frank De Julio, Condola Rashad, Danny Glover, Kathy Bates.

El día del cumpleaños de Tom (Michael Shannon), un amigo suyo aparece con Alice (Rachel Weisz), una joven a la que acaba de conocer. 

La perfecta desconocida (2016) nos ofrece una muestra más de lo curioso e imaginativo que puede ser el cine independiente, último refugio de propuestas serias. Pero, por desgracia, es un tipo de cine que, por su propia naturaleza, está alejado del gran público. Y esta película nos demuestra el motivo.

La perfecta desconocida tiene muchos detalles interesantes pero, al mismo tiempo, patina en otros, como por ejemplo un ritmo demasiado cansino o los esfuerzos del director en dejar su impronta, lo que da como resultado algunas imágenes sugestivas y otras muchas innecesariamente personales. 

Pero prefiero quedarme con lo positivo de la película.

En primer lugar, el argumento realmente original donde se nos cuenta una historia de amor truncada y, a pesar de todo, auténtica. Porque Alice, que entonces tenía otro nombre, y Tom tenían una historia de amor en su época de estudiantes. Pero ella, un día, desapareció sin dejar huella. Quince años después, regresa con la sola intención de ver de nuevo a Tom. Descubrimos entonces, a la vez que su antiguo novio, los motivos de su desaparición que no son otros que la necesidad de Alice de reinventarse, cambiar de vida, de oficio, de nombre, viajando por todo el mundo y, cuando siente que su nueva vida se ha agotado, emprender un nuevo cambio.

La verdad es que, aunque algo inverosímil, Alice ejemplifica el deseo de muchos de poder cambiar su rutina, escapar de una realidad insatisfactoria y empezar de nuevo. Casi nadie tiene el valor de hacerlo y en la película se ofrece una imagen un tanto idealizada, pues presentan a Alice como alguien que consigue destacar en cada nueva profesión, algo al alcance de muy pocos. Pero el contraste que se establece con Tom, que lleva toda su vida con un trabajo que no le gusta y al que es incapaz de renunciar, valida la elección de Alice y, al mismo tiempo, explica el porqué no pueden estar juntos: son demasiado diferentes, a pesar del amor que se tuvieron y que aún sienten.

Me parece maravillosa la escena en que Alice involucra a Tom en sus mentiras, dándole una nueva identidad que debe adoptar a la fuerza. Es uno de los mejores momentos de la película.

La perfecta desconocida me parece una singular y original historia de amor, alejada de los tópicos y del consabido final feliz. Pero por ello, muy sincera y creíble y contada con mucha delicadeza. Sin caer en excesos, percibimos el dolor de ambos protagonistas por lo que no pudo ser y su resignación ante un futuro alejados de nuevo. Pero en la última escena, Tom tal vez parece que ha encontrado la fuerza para acompañar a su esposa (Azita Ghanizada) a su nuevo destino. Puede que no esté todo perdido para él.